
En general, las películas Disney trasmiten una ideología sexista que puede influir en nuestro personalidad y en la de los más pequeños, produciendo un efecto negativo sobre nosotros.
El lenguaje, los gestos y demás imágenes que cuando somos pequeños no analizamos pero sin embargo, ahí están influyendo de una manera u otra en nuestro pensamiento.
Pero la situación a cambiado, las nuevas princesas han evolucionado desde Blancanieves o Cenicienta hasta Mulán o Tiana, olvidando la imagen de chica preciosa y trabajadora en tareas del hogar y creando la de chica independiente con unos valores propios y luchando por lo que ella realmente cree que es lo bueno.
Podéis ver una descripción de algunas princesas Disney y su evolución aquí.
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