En los
últimos años, la idea de potenciar en los niños pequeños el aprender dos
idiomas se ha visto aumentada al igual que la de pedagogos y psicolingüistas
que ensalzan los beneficios de manejar varios idiomas y no solo para conocer
distintos países y culturas o encontrar más empleos.
En la
actualidad, todavía se hablaba del bilingüismo diciendo que si se aprendía de
manera precoz, retrasaba el desarrollo verbal e incluso, cognitivo.
Por lo
que se realizó un estudio en el que se presentaban a distintos bebés de solo
siete meses, a quienes se les enseñaba una secuencia de sonidos similares a
palabras. Al final, como recompensa, siempre aparecía un muñeco en la misma
esquina de la pantalla que estaban observando. Cuando los psicólogos, creadores
del estudio, cambiaron la serie y posición de la imagen, los niños criados en
un entorno poliglota rápidamente dirigían la mirada a la nueva posición.
Mientras que, los monolingües seguían
insistiendo en la ubicación anterior. Es decir mostraban una menos flexibilidad
mental.
Por
ello, es tan importante que ya desde pequeños les ayudemos a aprender otro
idioma, como es el inglés. Recordemos que los niños son esponjas y que en
edades tan precoces van a ser capaces de memorizar información que nosotros ya
con una cierta edad no.